Si bien hay varias definiciones sobre
autoempleo, todas coinciden que parte de una actividad emprendedora. Sin
embargo, a mí entender son situaciones diferentes.
Emprender es una actividad
productiva. Las actividades productivas que no terminan generando empleo para otras
personas terminan siendo sólo un emprendimiento de autoempleo. Y por autoempleo
también se entiende el ser dueño de un establecimiento unipersonal. Tiene
muchos nombres, pero todos hacen referencia a la persona que trabaja sola.
Muchas veces ocurre porque no tienen suficiente capital ni las mejores
condiciones.
Según la Corporación Andina de
Fomento (CAF) en América Latina se ve que muchos trabajan en la vía pública, en
instalaciones que no son estables o que están dentro de la vivienda, no tienen
proveedores fijos ni clientes fijos. En este continente, generalmente, el
autoempleo está relacionado con varias características que se llevan a fin de
cuentas a tener ingresos bastantes más bajos, que son actividades improductivas
que por lo general se asocian al sector informal y terminan repercutiendo en la
pobreza. De hecho, el ingreso en el autoempleo tiene mucho que ver con la
necesidad de salir de la pobreza, de tener al menos un trabajo que asegure la
autosubsistencia. Vale aclarar que se está haciendo referencia al autoempleo
informal, no de un abogado que se pone su estudio o de un diseñador freelance. Sino
que se refiere a alguien que vende ropa que le compra a otro, o que cose, o vende
café en la calle. Cuando se está en este tipo de ocupaciones es muy poco
probable que se transite hacia un empleo de mejor calidad.
Según el mismo organismo, en América
Latina entre los autoempleados y los microempresarios sólo uno de cada cuatro
tiene camino de éxito relativo (compra una maquinaria, se expande, pone una
sucursal, contrata más empleados). Por tanto y según el mismo organismo, esa
idea de que América Latina es muy emprendedora y que mucha gente tiene su
propio negocio no es tan buena como parece a primera vista porque gran parte de
la composición del emprendimiento es el autoempleo.
Me parece importante así, diferenciar
en qué situación nos encontramos ¿somos emprendedores o buscamos el autoempleo?
Creo que hay muchas formas de autoempleo y no todas son precarias, por más que en Latinoamerica se asocie más con una manera de salir adelante que no revierta finalmente en unos resultados éxitosos.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, Dora. Por eso marcaba la diferencia con un free lance o un abogado, contador por ejemplo que trabaja por cuenta propia.
EliminarLo que sí me parece importante es que cuando se habla de emprendedores en América Latina, muchas veces entra dentro de esta categoría formas de empleo que son diferentes.